
Últimamente suelen llegarme bastante mensajes mediante terceros de la cúpula del club, tanto de empleados aficionados a los Gin Tónics de Larios como de presuntos corruptos imputados, sobre mis columnas en As y mi forma de opinar; incluso parece que más o menos han llegado a sugerir a gente del diario que estaría bien que no publicaran mis columnas porque las consideras contraproducentes para su tranquilidad. He de decir que en 5 años que llevo escribiendo en el diario As, al igual que cuando lo hice en BIB, nadie me ha dicho nunca lo que tengo que escribir o no, de lo contrario abandonaría en el minuto uno, primero porque a mi la lengua me la pusieron para hablar y no para lamer culos y segundo porque yo con el Espanyol no juego lo más mínimo. Mi conciencia y mi forma de ser no me permitirían bajo ningún concepto mirar a otro lado o callar ante hechos que bajo mi opinión perjudican gravemente al club de nuestros amores. Uno siempre opina de la actualidad: si toca animar todos a una para salvar la categoría se hace, si toca final de copa a muerte con ella, y si toca comentar algo positivo como la construcción del Nou Sarrià pues se dice con toda la alegría e ilusión del mundo. Lo que pasa es que hay gente que está muy bien acostumbrada a que les doren la píldora constantemente, a que les hagan entrevistas baño masaje, y a que les digan siempre lo bien que lo hacen. Las prostitutas de la información perica son muy cariñosas y es que desde el principio de los tiempos no hay ninguna especie que muerda la mano que le da de comer. Creo firmemente que los que nos intentan dirigir, en lugar de malgastar su tiempo intentando cerrar mi boca o acongojarme, algo que no van a conseguir jamás, deberían hacerlo en gestionar bien el club, en no parir un escándalo tras otro, no dar esa sensación de desgobierno tan patética y lamentable que se ha acrecentado mas si cabe desde que llego al sueldazo Joan Collet, conocido en su pueblo según publicaba LA GACETA por ser un poco vago. Pero gestionar bien cuesta, es difícil, apto solo para personas preparadas; lo fácil es disparar el cañón contra los que critican, llamar resentidos y malos pericos a los que dicen verdades y dan la cara, eso es lo fácil y también lo cobarde. Si bien he de decir que a pesar de todo sigo pensando que todavía valgo más por lo que callo que por lo que hablo… Porque callar sigo callando mucho, por ejemplo una historia muy bonita que me contó un conocido socio del palco VIP sobre unas cuentas muy curiosas en Suiza y como se le intentó callar, o de quienes son propiedad los pisos de Sarrià o algunos terrenos colindantes al campo del Espanyol… Por cierto que tengo el mismo número de móvil de siempre si alguien tiene ganas de decirme algo ya sabe donde encontrarme, mas que nada porque es muy ruin mandar recados a través de amigos comunes… Mágico Espanyol.