TAMUDO Y JOSÉ TOMÁS
Estaba leyendo atentamente el otro día la biografía publicada por Carlos Abella sobre José Tomás y, sin saber ni como ni porqué, me vino a la mente la figura de nuestro Raúl Tamudo. Dice Abella sobre el diestro de Galapagar que es una persona muy apegada a los suyos, un punto de bohemio, no quiere saber nada de la fama y que pese al aura de leyenda que le envuelve le cuesta asistir a homenajes y le da vergüenza aparecer en público. Muchos medios y gentes del toreo han llegan incluso a tratarlo de suicida, loco o huraño, simplemente porque no se presta al c
irco mediático que envuelve a algunos espadas que lejos de forjar su leyenda en los cosos como lo hace José Tomás o lo hizo su ídolo Manolete han de lograr que se hable de ellos por otros asuntos que andan muy lejos del arte que rezuma de la arena. Cambien el círculo por el rectángulo, lo rojizo del ruedo por el verde y más o menos asimilaran la historia de Tamudo. De él se ha dicho de todo, jamás ha desmentido con palabrería, a los que le acusaban de falta de compromiso les contestaba con goles, c
on títulos, engrandeciendo su leyenda, con el balón, con sacrificio y besando a cada triunfo nuestro escudo. La memoria de Tamudo está ya tatuada por siempre con tinta de grandeza en lo mas hondo de nuestros corazones. Tamudo, como Tomás, se ha hecho leyenda esquivando embestidas al natural, arrimándose, al límite. Lo cual tiene un mérito tremendo en los tiempos que corren. Hasta siempre capitán, contigo se va otro trozo de ese Espanyol que tanto me enamoró.
Estaba leyendo atentamente el otro día la biografía publicada por Carlos Abella sobre José Tomás y, sin saber ni como ni porqué, me vino a la mente la figura de nuestro Raúl Tamudo. Dice Abella sobre el diestro de Galapagar que es una persona muy apegada a los suyos, un punto de bohemio, no quiere saber nada de la fama y que pese al aura de leyenda que le envuelve le cuesta asistir a homenajes y le da vergüenza aparecer en público. Muchos medios y gentes del toreo han llegan incluso a tratarlo de suicida, loco o huraño, simplemente porque no se presta al c
irco mediático que envuelve a algunos espadas que lejos de forjar su leyenda en los cosos como lo hace José Tomás o lo hizo su ídolo Manolete han de lograr que se hable de ellos por otros asuntos que andan muy lejos del arte que rezuma de la arena. Cambien el círculo por el rectángulo, lo rojizo del ruedo por el verde y más o menos asimilaran la historia de Tamudo. De él se ha dicho de todo, jamás ha desmentido con palabrería, a los que le acusaban de falta de compromiso les contestaba con goles, c
on títulos, engrandeciendo su leyenda, con el balón, con sacrificio y besando a cada triunfo nuestro escudo. La memoria de Tamudo está ya tatuada por siempre con tinta de grandeza en lo mas hondo de nuestros corazones. Tamudo, como Tomás, se ha hecho leyenda esquivando embestidas al natural, arrimándose, al límite. Lo cual tiene un mérito tremendo en los tiempos que corren. Hasta siempre capitán, contigo se va otro trozo de ese Espanyol que tanto me enamoró. COLUMNA PUBLICADA EN AS EL DÍA QUE SE DESPIDIÓ TAMUDO. 08/05/2010
GRANDE TAMUDO, GRANDE JOSÉ TOMÁS DOS HOMBRES CON COJONES, SIEMPRE
ResponderEliminarMolta pena ahir amb la despedida del capità TAMUDO per sempre.
ResponderEliminarque gran columna que buena la comparación, felicidades robert por tu lucha a favor de tamudo siempre hasta cuando todos lo ponian a parir he leido muchas columnas tuyas sobre el capitan pero esta de las mejores.
ResponderEliminarel mejor jugador de nuestra historia sin duda, RAUL TAMUDO MONTERO 23
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